¡Hola a todos!
Hace poco leí una noticia titulada: Un 10% de jóvenes ha sido rechazado para un trabajo por su perfil en Redes Sociales. Y la verdad, a mi me parecen bastante pocos…
El curso pasado di una formación a universitarios sobre la importancia de crear una correcta identidad digital, ya que podría repercutir en su futuro laboral. A menudo observo que la gente le da poca importancia a este aspecto y se dedica a llenar sus perfiles de fotos comprometedoras, tweets/entradas/comentarios inoportunos e incluso ofensivos. ¡Como si sólo pudiesen leerlo sus «colegas»! Y yo me pregunto… si en nuestra vida diaria, intentamos ser personas responsables, trabajadoras, coherentes, etc… ¿por qué utilizamos las redes sociales para ser todo lo contrario? ¿O es que acaso somos como mostramos en las redes sociales realmente? Siento que es un problema de concepto, de confundir libertad con libertinaje, de una no educación digital. Pensamos que todo aquello que compartimos no va a trascender más a allá de lo esperado sin saber que el poder de las redes sociales, a veces, es inimaginable e incalculable.
Hay personas que opinan que no tienen que juzgarte por lo que haces fuera de tu horario laboral, que lo que tienen que mirar es lo que haces dentro del mismo. Evidentemente, lo que hagamos en nuestro puesto de trabajo es para lo que nos han contratado, pero por mucho que nos empeñemos, cualquier trabajador de cualquier empresa del mundo en mayor o menor medida, es embajador de la misma. Es lo que en el mundo del marketing se le conoce como la marca. Puedes ser un empleado modelo dentro de tus funciones, pero cuidado, los clientes o posibles clientes de tu empresa, si pueden, te observarán las 24 horas del día y pueden asociar lo que haces fuera de ella a tu empresa. Y eso, a los jefes, les preocupa. Por ejemplo: ¿Qué opináis de un policía que fuera del trabajo maltrata a su mujer? ¿O de un profesor que es adicto a las drogas? ¿O de un médico que se descarga pornografía infantil? ¿Os fiaríais de ellos? Sí, he sido muy duro con estos ejemplos e incluso extremista, pero no me los he inventado yo, son casos reales que han salido en las noticias que nos invitan a reflexionar y a debatir sobre este tema. Las dobles vidas, siempre generan confusión. Si tú eres policía, lo eres las 24 horas del día. Eres una persona, una formación, una profesión, un modelo, un referente, una actitud. Si eres profesor, lo eres las… etc.
En este sentido, las personas nos acogemos al derecho de privacidad, que está muy bien y es muy importante, faltaría más. De hecho, las redes sociales permiten establecer filtros de seguridad y elegir quienes pueden ver nuestra publicaciones. Estas medidas deben servir para proteger la coherencia, como puede ser compartir una foto de tu hijo para que tus allegados la vean, un mensaje de cariño a un amigo, o incluso una regañina oportuna a alguien que la merezca. No para cubrirnos las espaldas con aquellas cosas que sabemos de antemano que si las utilizo es porque se que a alguien, le va a molestar o sirven para hacer daño. Para mi no hay mejor defensa de la privacidad, que no tener nada que ocultar y ser coherente y respetuoso con tus publicaciones.
Las redes sociales no se crearon para escribir lo primero que se me pase por la cabeza, y si las utilizas para ello, lo normal es que aquellos que lo vean, puedan cuestionarse si merece la pena o no contactar contigo.
Para finalizar, os dejo un vídeo sobre la importancia de saber utilizar las redes sociales correctamente, en este caso se trata de Facebook, la red social con más usuarios del mundo.
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